miércoles, noviembre 26, 2008

Yupi! Montaña rusaaaaaaaaaah!!!


Comiendo zanahoria y sentada sobre mi cubre cama color zanahoria observo como mi novia, toda hecha una nerd, como una zanahoria estudia microeconomía sentada sobre nuestro escritorio.
Mientras yo me muero de hambre y de pereza de cocinar en mi mente todo transcurre como en una montaña rusa, y empiezo por momentos a sentir ese vértigo delicioso. El cansancio y el calor contribuyen a que este hermoso cosquilleo me haga sentir el arrebato de vivir.
El arrebato de sólo tener que mirar porque ahí está mi zanahoria, con su paz, con su alegría, con su vida, con sus miedos, con sus estreses, en todo su ser con toda su presencia aunque su cabezita sólo piense en términos de dólares...
No, no me da miedo compartir mi vida con esta geniecita que al parecer tiene planes de que seamos peluconas dueñas de un yate, caballos y esas cosas que cuando uno es guagua parece que son la felicidad.
¿Por qué no me da miedo? Porque sé que es un ser humano al sentirla vibrar en mis brazos, mirar la ternura en sus ojos. Porque despertar a su lado quita cualquier miedo y dormirse junto a ella es la máz apacible ternura que se puede sentir jamás.
Porque su amor se inmiscuye en todos los amores, porque su imagen se asocia con todo tipo de belleza porque....

La frase de hoy


Apprendre c'est prendre des habitudes!

Aprender es adquirir hábitos

Me gusta hacer mil cosas a la vez. Hay veces en que las ideas fluyen para todos lados y me encanta tener el poder de moldearlas, conducirlas y crear en mi mente tejidos inentrañables, cualquier cosa que eso quiera decir...
Malditas interrupciones que llaman a la estructura.
Una zanahoria será suficiente para aplacar mi hábito por ahora, hay que comer menos, estoy gorda...
Pero qué importa si soy feliz?