martes, diciembre 09, 2008

Reflexiones mensuales: diciembre

El concierto de Lila una MARAVILLA. Vi disfrutar a cierta zanahorita y me arrepentí de haberme arrepentido (valga la redundancia) de haberle comprado entrada para algo que ni conoce. Se emocionó, nos emocionamos, gritamos, bailamos y nos enamoramos más de México, next stop México, no sé qué cuidad aún ni qué cuernos iremos a hacer allá...Pero ya se verá, jejeje....
Entre 8 horas diarias de trabajo y morirse del calor, entre películas e insomnios transcurre el mes día a día, y hay momentos en que parece que un día es lo mismo que un segundo.
El domingo por fin bailé tango!Espero que eso pueda llamarse bailar. Fue una clasesita que me hizo darme cuenta de que ciertas cosas, aunque parezcan irse, no se van. Hubiera sido bueno que vaya a la milonga, pero bueno, trabajaba el lunes, así que ni modo...Pero de todas formas me prometí que el próximo domingo si es que hay clases de tango después voy a la milonga de plaza Dorrego así vaya a hacer el ridículo. Igual de noche no suelo poder dormir, al menos con este calor...
Ayer vi Ratatouille, no pude terminar de verla, pero estaba buena! Desgraciadamente esa huevada para ver películas en el internet sólo te deja ver 72 minutos de corrido, de ahí toca esperar como una hora antes de seguir viendo, a las 2am eso ya no es posible, quedará para hoy noche.
Lo que se viene me asusta un poco, mi media naranja se va el 24 a pasar las fiestas con su familia en nuestra tierra. Yo no me voy, ni me iría así tuviera los medios, no tengo ganas, me gusta acá y me da igual pasarla sola...Lo que verdaderamente me asusta es estar lejos de esa personita, pero bueno, YA NO LE TENGO MIEDO A LA SOLEDAD (no sé si es verdad o lo digo porque me estoy convenciendo). Menos mal
Navidad, patraña de todas formas, pero no deja de ser culturalmente fiesta familiar, y yo qué voy a hacer? Aún no tengo idea, hay varias perspectivas, pasarla con mi "familia" de roomates o con un colega de trabajo, la primera idea me gusta más, pero sé que me vence la ternura de ver a alguien completamente solo un 24. No es nada religioso, es más bien cultural...
Y lo mejor, el 31! Siempre lo espero con fieras ansias, este año será en Montevideo con mi papá. Ayer se cumplió exactamente un año de la primera vez que escribió un mail, desde que reapareció, y curiosamente también fue su cumpleaños, por qué será?
Enfin, siento que el tiempo pasa y me hace vientito en la cara y me gusta...No quiero pensar en mirar atrás dentro de unos años. Me siento bien, no siento que estoy envejeciendo, sino más bien creciendo. Y eso está bien, no?
Y sigue la montaña rusa a fin de cuentas...